Clase de Deportes

-Me encontré con el salón de las clases de deportes al fin,varios chicos estaban ahi y me miraban como si fuera una especie de extraterrestre mutante,me reí bajito ante mis pensamientos,después me puse seria,tenía que concentrarme en mis estudios,asi que me dirigí al maestro,el cual tenía en las manos un balón de Voleibol,era pésima en ese deporte,suspiré de puro nerviosismo,en poco tiempo estaba frente al profesor el cual me miraba serio-

-Perdon por la tardanza,estaba en la dirección-me justifiqué al segundo y el profesor me entregó un uniforme de un color un tanto extraño y que seguramente me quedaría grande-En donde me lo pongo-pregunté mirando al rededor buscando alguna puerta-

-En los baños de por ahi-dijo el profesor señalando una pequeña puertita del lado derecho,dejé la mochila en el suelo y me dirigí al baño,rápidamente me puse el short color azul y la blusa blanca,la cual me quedaba grande tal como lo habia predecido,al final me puse un par de tenis blancos,salí del baño y todos ya estaban trabajando,pasaban pelotas blancas de un lado a otro como pequeñas bolas de papel,caminé hacia el profesor-

-Ponte a trabajar con esa chica de ahi-señaló a una chica sentada en una banca-voleen un poco-me dirigí a la chica y me senté a su lado-

-Empezamos??,tenemos que voleear-dije sin entender esa palabra-no se de voleibol mucho,tal vez tu si-le sonreí,luego miré a los demás-SOy Keyra Killam,un gusto-dije aún distraída-

Había llegado temprano a la clase de deportes. La verdad era indiferente a la materia, mi coordinación no estaba del todo mal. Cuando me había cambiado, me senté a ver como se llenaba el gimnasio de gente, hasta uqe la clase estuvo prácticamente llena. Finalmente el entrenador le indicó a una chica que trabajara conmigo, intenté cambiar mi expresión de aburrimiento para no incomodarla, luego me puse de pié y pasé al frente de ella sin mirarla siquiera. No quería darle ni una gota de confianza a ésta humana, por muy amable que pareciera, no quería hacerle correr ningún peligro.

Me paré en frente de ella y flexioné las rodillas. -Debes impulsar el balón con tus antebrazos extendidos de éste modo- dije estirando mis brazos, con las palmas unidas. -Puede que al principio sea doloroso pero te acostumbras- Le aconsejé en tono serio, era evidente que los deportes no eran su fuerte.

Sentí que el balón rebotó con fuerza contra alguna parte de mi cuerpo, no sentí nada, pero por la distancia a la que llegó parece que había sido algo bastante fuerte. Cuando la chica se acercó a mí, me sujeté la frente con las manos. -Descuida estoy bien-, dije poniendo una mano al frente para evitar que se me acercara. Me enderecé de nuevo.

la tomé por los hombros y luego me posicioné a su lado. -Solo dobla las rodillas un poco así, y estira tus brazos- le dije suavizando mi tono de voz.
-Cuando veas el balon llegar, solo esstira tus rodillas, es fácil- le sonreí un poco.

-Ehmmm si, la verdad me dolió bastante-, mentí agarrandome de nuevo la cabeza, -Pero creo que sobreviviré- sonreí un poco. Luego de un lanzamiento no del todo mal, ví como se agarraba los brazos adolorida, -No está tan grave- dije con una sonrisa burlona, -Es mejor que intentes lanzar hacia arriba y con menos fuerza-. Luego me paré a su lado y le agarré los brazos. Puse el balón en el aire y movía los de ella de arriba hacia abajo. -Vez? no está tan mal- dije alejandome un par de pasos. -Supongo que los moretones de mañana serán poca cosa- sonreí.

Antes de querer lanzarle la pelota, crepi conveniente disculparme por haber sido tajante al principio. -Mucho gusto, soy Dennisse, que pena si te molesto, esque no es el mejor de mis días-. dije extendiendo mi brazo con la palma de mi mano abierta hacia ella.

-Te sorprenderias de lo seguido q me ocurre- dije entre dientes.
-Estàs lista para el balon?, o si quieres podemos sentarnos, no creo que al entrenador le importe. -dije con una sonrisa pìcara

-Por favor no digas eso ni en chste- dije con voz algo severa -Baja tus brazos, creo que tuvieron bastante por hoy- sonreí y la agarré de un codo, -sentemonos, eso sera mas productivo - sonreí un poco

-No te preocupes, no es tu culpa.- dije en tono comprensivo.
-No te había visto en el instituto, de donde vienes?- pregunté, intentando mantener esta vez, un tono mas amable.

-Soy de Ingalerra y tu??-le sonreí-apenas me mudé y bueno..ya vez que soy pésima aqui-me reí-

Crucé mis piernas, mientras seguía mirándola con atención.
-Europa.. genial! soy de Belleville, parís- dije sonriéndole. -y no te preocupes no todos podemos ser buenos en todo-. El entrenador estaaba a punto de decirnos algo, tan ronto abrió la boca me quedé mirándolo a los ojos. Se volvió inmediatamente.

-Supongo que no es la gran cosa- sonreí amablemente.
-Quieres cambiarte? no creo que a alguien le interese- Tenía que sacarla rápido de allí, se había fijado en la rección del enorme maestro ante mi mirada.

le lanzé otra mirada furtiva al entrenador, ésta vez para que se alejara del todo, no era nada conveniente que Keyra se fijara tanto en sus reacciones. Me volví nuevamente hacia ella sonriendo. -Hace cuanto tiempo llegaste- intente cambiar el tema.

-Genial ese pase Steph!- le grité animadamente a una chica que estaba jugando, me miró extraño, pero necesitaba algo para que Keyra dejara de lado al entrenador.
-Wow, es realmente pocoo tiempo, si necesitas algo solo avisame- dije mirandola nuevamente

nada impoortante- dije sonriéndole.
tenia que admitir que desviar la atencion de la chica no era nada fácil, pero parecia estar funcionando.
-llevo tiempo aqui, sabes? peroe s dificil acoomodarse