Ayudando a cruzar un alma

**Evanna Ange Dechú** Lun Feb 02, 2009 4:27 am

De todas las cosas que pasaban en ese mundo, uno que yo apenas conocía y al que no amaba del todo, lo que más me causaba una intensa tristeza era la muerte. Era extraño, porque podía saber lo que pasaba con las almas de los muertos, pero por alguna razón, ver como la vida se marchitaba en los cuerpos humanos me hacía sentirme muy melancólica. Quizá por eso no solía pasear por los hospitales, pero ahora tenía que hacerlo y miraba en respetuoso silencio a la cama de un hombre joven, todavía dormido, con una respiración rasposa y entrecortada, sin saber del todo que pronto iba a perder la vida.
Esperé, sin atreverme a acercarme. Hacía mucho tiempo que no establecía contacto con ninguna emoción mortal y sabía que ver el aspecto del durmiente podía quebrar con esa distancia. Así que sólo me concentré en esa respiración y en cada latido del corazón enfermo, lamentando un poco que todo tuviera que terminar.
Conforme pasaban los minutos, me fui dando cuenta de que se acercaba peligrosamente el momento. En un determinado instante me vino la premonición de que era hora y levité hacía un costado del moribundo, despertándolo con delicadeza, necesitando tan sólo un toque de mis alas para hacerlo.
Él me miró sin sorpresa, como encantado por la magia del cielo.
- Ya es hora- musité con voz dulce- Debes venir.
El joven asintió. Eran escasas las almas que se tomaban con tanta calma la muerte, pero ese chico era una de ellas.
Le sonreí como el ángel que era y...
Lo ayudé a cruzar.
Al finalizar esa noche, yo ya me encontraba en medio de la habitación del muerto otra vez. Su cuerpo estaba muy quieto y en paz, con las manos relajadas a los lados.
Los médicos hicieron todo por salvarlo cuando se dieron cuenta del viaje. Pero nada pudieron hacer y todo terminó en una simple fracción de segundo.
Cuando se fueron todos me senté en la cama.
Y una lágrima negra surcó mi mejilla, como si quisiera delatar una angustia que, aunque me hubiera gustado, en realidad no podía sentir.