En la playa....

Habiamos tardado un cuarto de hora hasta llegar a los Angeles desde San Diego. Durante todo el viaje hubo silencio, aun asi no resulto incomodo. Al poco rato tome un desvio que nos llevaba directamente hasta la playa. Al llegar estaba practicamente desertica, asi que no tube ningun problema para aparcar. Salimos del coche, y yo puse la alarma de seguridad. Suavamente me dirigi a la playa, hasta llegar practicamente la orilla.

- Bueno aqui estamos.- Le dije mientras me giraba para verle

Llegamos al poco tiempo, la brisa del mar era refrescante. Samm se acerco a la orilla y la seguí. -Es un lingo lugar, sin embargo me gustan más tus ojos.- confesé para luego fijar mi vista en el infinito mar que se abría frente a nosotros. -Te gusta venir aquí? Digo muchas personas vienen para relajarse y pensar un poco.-
Caminabamos por la orilla, charlando un rato.

Comencemos a caminar por la orilla tranquilamente.

- Si, la verdad me relaja.- Confese sonriendo timidamente

-Eso es bueno, vale la pena alejarse un poco de todos los problemas del pasado. Todos necesitamos relajarnos de vez en cuando.- dije tranquilamente. -Nada fuera de lo común.-

- Eso es.- Dije destacando la frase.- Nada fuera de lo comun.- Añadi

Nos pusimos a caminar tranquilamente, el aire traspasaba velozmente mi cuerpo, aun asi no resultaba molesto.

- Siempre es bueno olvidarse de los viejos asuntos.- dije mientras miraba hacia el suelo

-Tienes razón.- Noté que agachaba la cabeza y tome la libertad de con una mano subir su mirada para que quedará viendo mis ojos. -Se que nos acabamos de conocer y tal vez no es de mi incumbencia, pero noto que algo te preocupa, molesta o entristece... Estas bien? Si quieres puedes contarme, no le diré a nadie.- dije algo preocupado pero sonreí.

- Si te lo contara tendria que matarte.- Dije riendo divertida.

Me saque las botas que llevaba, aconjunto con el vestido blanco que llevaba. Me acerque a la orilla y deje mis pies tocar con la fria agua del mar.

-Si te hace sentir mejor.... No me opondré.- dije permaneciendo en mi lugar. -Cuentas conmigo Samm, digo para estan los amigos o no.- guiñé un ojo y sonreí.

- Gracias.- hice una sonrisa, y volvi de nuevo a la orilla.- Pero no creo que sea el momento para contar nada.- Sonrei leve,emte y me coloque de nuevo las botas

-Pues cuando lo desees puedes contar conmigo.- dice serio y seguí caminando por la orilla. Había pasado una buena tarde con Samm, no quería que esta llegará a su fin.